Existe una Ley universal que nos recuerda esto. La Ley de los espacios vacíos nos cuenta que «todo espacio vacío se llenará por algo con un propósito relacionado con lo que le rodea». Si algo muere, algo nace. Si alguien se va, otro llega. El tiempo con el que se ocupa ese espacio es relativo y obedece a otras leyes que se sincronizan de manera perfecta logrando un equilibrio universal. El remplazo de una emoción por otra, de un pensamiento por otro o de una sensación por otra hace parte de esta Ley.

¿Por qué hablo de leyes cuando el tema es el propósito? Sencillamente porque si todo en el universo tiene un propósito, ¿cómo puede ser que algunos seres humanos sientan que no lo tienen? Quien afirma que no tiene un propósito en la vida, ha creado un limitante mental tan grande que sus actos lo sacarán de la Ley Universal y posiblemente los resultados que obtenga en la vida sean complejos y no le aporten armonía.

Los propósitos de los seres humanos normalmente obedecen a la cultura y a los deseos del Ego. Ser adulto, tener una carrera exitosa, crear una familia, vivir en una casa grande, viajar por el mundo y ser feliz son varios de los propósitos que aprendemos a desear según la cultura en la que estemos sumergidos. El Ego obedece a la cultura, ya que ésta nos proporciona una identidad, un estado de bienestar, sentido de pertenencia y seguridad. Sin la cultura a la que creemos pertenecer, no sentimos perdidos, solos, incomprendidos y sin sentido.

¿Qué pasaría si te preguntara sobre los propósitos que tienes ajenos a tus creencias? ¿Existe algún propósito que no obedezca a una información cultural previa?

Lo que puedo decirte es que los propósitos culturales son temporales. Se circunscriben a un espacio tiempo determinado y si llegasen a variar de manera súbita, gran parte de tu armonía o equilibrio emocional se derrumbaría.

¿Cómo trazarse propósitos atemporales?

No puedo decirte cuales deberías tener en tu vida ya que si o hago estaría interviniendo en tu libre decisión y ya eso lo hace la sociedad y tus seres queridos. Pero puedo darte unas claves para que pienses cuales pueden ser buenos propósitos atemporales.

• Aprender algo nuevo.
• Desaprender algo viejo.
• Crear hábitos constructivos.
• Deshabituarme a comportamientos destructivos.

Con estos cuatro puntos tienes para trabajar 365 días del año.